Mocasines saltarines.

Los martes son siempre un día guay. El último martes no pudo empezar mejor. Hace meses que quería quedar con Cristina (conocida popularmente por todos como Cristina Chanel). Quedamos en Tribunal a media mañana y nos desplazamos hasta el Ojalá, y compartiendo un desayuno acompañado de buena música, hablamos sobre moda, marketing, sociología y economía. Cristina es una de esas chicas que aparentemente parecen frágiles, pero luego tienen una fuerza brutal y una cabeza prodigiosa. Creo que esta chica tiene un buen futuro por delante en el mundo de la moda.

Para comer, me junté con Carmen de la Cerda y Edu Lozano en el Lateral de Fuencarral. Habíamos prometido controlarnos y no volvernos a dejar el dineral de la otra vez. Comimos poquito a poco y al final, conseguimos no salirnos de presupuesto. Por allí pasaron también Jaime Durán (19 años, modelo), Vito y Jokin e hicimos una sobremesa de 3 horas y pico. Hablamos de bukkakes, del nacimiento de nuevos blogs de críticas, de drogas y fiestas y llegamos a la conclusión que con cada día de nuestras vidas, podríamos hacer un Gossip Girl a la española. (Maca, cuanta razón, que flojo el 2x10). ¿Cómo se llamaría? ¿La Cotorra? ¿La Maruja?... no lo veo, no. Además, Jaime me contó que la nueva moda es recoger ropa de los contenedores y reutilizarla, previo paso por la lavadora. Nunca me dejará de sorprender la juventud.

Como todos sabéis, yo no acostumbro a salir los jueves más allá de cenar o tomarme una copita tranquila. Los viernes tengo clase (vale, a las 3 de la tarde, pero la tengo) y el año pasado ya pasé demasiados viernes luchando contra el sueño y la resaca en clase. Pero ayer, con motivo de la visita de nuestro amigo Lolo, me animé a salir un rato y acabó siendo una noche estupenda. La noche comenzó en casa de Jon, Pablo y Alex jugando a Gran Hermano, donde, ejem, salí favorito con 0 nominaciones. Pronto publicaran los videos de la noche. Es increíble como nos conseguimos meter en el papel. Todos estamos esperando a que llegue el reality de nuestra vida, no nos engañemos. Todo el mundo ha querido ser alguna vez Melania.

Una vez grabada toda nuestra gala, cogimos un taxi dirección Boite. El señor taxista miraba con cara de cordero degollado a Pau Eiroa y sus tetas. Nada más llegar, me encontré con Josito Ramírez, Adrián Prieto y Ugaitz. Ayer la Boite ganó puntos conmigo. Seguramente se deba al alcohol que llevaba encima. Y a que a mi me tira más un pijo que un tonto un lápiz. Creo que lo de ir a un colegio privado me dejará marcado para toda la vida, con este fanatismo hacia los castellanos, los pantalones chinos y las camisas. Me lo pasé estupendamente, de esas noches que no quieres que acaben nunca.

Hoy estrenamos sección itinerante: SECCIÓN DESMENTIDOS OFICIALES.

- Mis pestañas son así naturalmente y nunca me hago nada para que se ricen. Lo siento por aquellos que vivís pegados al bote de rimmel, queridos.
- No me pasa nada últimamente ni me encuentro triste. Llevo alrededor de un mes recibiendo continuamente mensajes y teniendo conversaciones sobre si estoy triste. No, no y no. Estoy en un buen momento personal, estable pero divertido.
- No soy ni Gossip Girl ni Perez Richie ni Maruja Cotilla. En realidad si lo fuese, tampoco os lo iba a contar claro. Pero bastante tengo con atender a este blog como para pensar en maldades en otro.

PD: Pongámosle un poco de luz a tus días.