Footing

Este fin de semana ha sido muy divertido. Afortunadamente he compartido la mayoría con mi querido Fernando Abras, que para lo que no le conoceis, os diré que es uno de los chicos más interesantes que he conocido en esta vida. Este verano estuvo trabajando para la ONU en Ginebra, explorando intensamente la cultura centroeuropea. Nunca olvidaré que a los pocos días de conocerle me dio mi primera vuelta en vespa por Madrid allá por Mayo de este año, a pesar del miedo que le tengo a las motos.

El viernes cenamos en su casa en compañía de su hermana María, que es una niña preciosa. Teníamos ganas de cambiar un poco de aires así que decidimos ir a Boite. Aunque parezca raro, llevando años conociendo las virtudes amatorias masculinas, nunca había estado allí. Segun me lo imaginaba, debía ser un sitio lleno de chicos a lo Javier Vara (uno de los chicos más atractivos de Madrid). Mis pensamientos se quedaban cortos. Aquello era un mercado de la carne en toda regla con Madonna y Kilye de BSO y todos con polos, camisas y zapatitos. Una delicia en toda regla. Conseguí confirmar eso de que los pijos en el fondo son los más guarros. Y tanto.

Dentro de la Boite conocí a German Ezquerro, la primera persona que me ha confesado públicamente que es mi fan. Encima tengo un fan simpático, aunque en realidad me da miedo pensar que haya sabido de mi existencia desde hace un año y medio y me siga. Querido German, lector de esto blog, un saludo allá donde estes. Tenemos una noche pendiente.

El sábado, para no perder costumbre, fuimos a beber a Barbieri, esa calle-botellódromo. Hay quien dijo ayer que Barbieri en sí misma ya es un garito, porque tardas media hora en llegar de una punta a otra. La policía, afortunadamente, ha dejado de hacernos visitas nocturnas por la calle y ya no tenemos que estar todo el botellón preparados con el dorsal para echarnos la carrera. Entre las personas a destacar en esa calle, mi descubrimiento en el último mes, la gran Johanna Ortiz, que es una alcorconera like me que me parece lo más. Me propuso irnos a hacer footing por nuestra cosmopolita ciudad, pero ya le dije que dada mi redondez, yo más que correr, soy más de rodar.

Como es Alcorcón, que gran cantera de estrellas: Johanna Ortiz, Ainhoa de GH4, Li de GH10, Mariano Mariano, la Terremoto, Franchejo de la Cerda... Propongo públicamente a nuestro alcalde, Enrique Cascallana, que el año que viene seamos Johanna y yo los que demos el pregón y tengamos que esquivar los huevos pochos que nos tiren los vándalos.

Para terminar bien el fin de semana, he quedado con Josito Ramírez, Adrián Prieto y el resto de sus amigos (éstos niños son una joya todos) para despedir el domingo con una buena cena en VIPS, la cadena de los amigos. En VIPS si piensan en gente como yo, que llega al domingo sin comerse una rosca. VIPS me quiere. VIPS nos quiere a todos.

Como punto final a este blog, comentaré lo pesada que se está poniendo la política española para que acudamos a la cumbre del G20 en EE.UU para hablar de la crisis. Miren, señores políticos (derechos, izquierdos y centros): un país en el cual existan series con mucha audiencia como Los hombres de Paco, Los Serrano o Escenas de Matrimonio, donde Estopa o Melendi pueden seguir cantando con total libertad y donde MªTeresa Campos tiene un programa de actualidad política NUNCA podrá acudir a una cumbre donde se traten temas de relevancia. Primero ayudennos acabando con cosas como ésas y luego podremos hablar de economía. Y si suben las patatas, que suban.